Los sociólogos Jean-Claude Thoenig y David Courpasson fueron al encuentro de estos ejecutivos rebeldes que están transformando la gestión.
En su último libro, “Cuando los ejecutivos se rebelan ”, levantan el velo sobre estos ejecutivos que, un día, se atreven a decir “NO”, disputan su jerarquía, renuncian a un ascenso y finalmente trastornan la dirección.
La necesidad de supervivencia convierte a la empresa en un lugar de sumisión en el que se intenta sacar el máximo partido a sus empleados, empezando por los llamados directivos de alto potencial.
En su deseo de triunfar, llevan los valores de la dirección durante un tiempo con la cabeza alta. Sin embargo, se está produciendo una brecha imperceptible entre la esfera pública de la empresa y la esfera privada de estos ejecutivos.
A los 40 años o en proceso de serlo, se sienten muy seguros ante cualquier violación de su "zona prohibida". La mayoría de las veces, el resultado es la rebelión.
Cada día más ejecutivos rebeldes recuerdan a las empresas que no pueden violar impunemente sus esferas privadas e ignorar el entorno social, cultural y moral en el que están inmersos.
Se trata de una cuestión de gestión que no pueden ignorar sin ponerse en peligro.
Más allá -o por debajo- del "sufrimiento en el trabajo", este libro es el primero que analiza, con estudios de casos, un fenómeno similar pero más sutil, el de la "coacción blanda" de la empresa hacia sus directivos.
Los autores demuestran que la protesta en el lugar de trabajo no es un simple caso de "cabreo" y que incluso puede ser creativa.
